Y para terminar el año: Tóxica presenta su nuevo disco Voces Sin Temor! en el Armageddon Metal Zone
El pasado sábado 12
de Diciembre la banda Tóxica presento su nuevo disco titulado “Voces Sin Temor!”
en el centro cultural Armageddon Metal Zone. Al evento asistieron por parte de
la agrupación Fidel Hernández “Fido”
(bajo y voz), Jesús Gordillo “Chus” (batería), Jani Ahmed (guitarra) y distintos
medios de comunicación, expertos degustadores del tema, público que por alguna
u otra razón logró aterrizar en el lugar, seguidores de la banda que no podían
perderse la oportunidad de presenciar tal acto… en resumen llego la mera banda. El
evento rompió con muchos esquemas que nunca se habían presenciado en nuestra
capital, e incluso me atrevo a decir, ¡EN NUESTRO ESTADO!, ya que citar a un
conglomerado de personas para que degustarán del material canción tras canción,
con sus respectivas explicaciones y opiniones de cada una, acompañado de
preguntas que el público realizaba a la agrupación en escena no es algo que se
tenga costumbre de realizar, por eso creo que la banda se lleva más que un diez
en este acto tan relevante y revolucionario en cuestión de dar a conocer un
material, bien por ellos.
La presentación
inicio a las 7: 40 pm, en el ambiente había una sensación de tensión para
romper el hielo con las palabras concisas y precisas por parte de la agrupación
y el público en general, tal sentir solo duro unos minutos ya que al reproducir
y analizar las canciones de “Voces Sin Temor!” el público se balanceo sobre la
banda con una lluvia de preguntas acerca del proceso que tiene la banda al
momento de elaborar su canciones, de donde nace la idea de Tóxica y el material
que traen consigo, cuales son las circunstancias que ha presenciado la banda en
la escena musical, cuales son las anécdotas que han ayudado a consolidarse como
es, cual es la dirección de la banda, y si tienen planes de producir más
material.
Como mediadores del evento estuvieron
presentes los masters Oswalt Vázquez y Merardo Antonio (¿pa’ que más queres?).
La agrupación expuso
ante el público que la conformación se debió a partir de retazos de amistad en
el lugar que los vio nacer, Ocosingo. Alternando con distintas bandas, cada
integrante logró parar las narices enfrente de sus compañeros por una vieja
llamada destino, ya que Chus el baterista venía mal parido de un género llamado
happy punk, el guitarrista Juan Carlos (gran ausente en la presentación) era un
pedante virtuoso que buscaba la luz de las presentaciones para demostrar con
que madera estaba hecho, Fido andaba en su duda existencial de a qué género enfocarse para formar una línea en ello y el otro guitarro Jani traía un sin
fin de bandas entre sus dedos. Así que con revueltas, chelas, rabia e ilusiones
se subieron a la barca de Tóxica remando hacía el desmadre y la expresión en
busca del cetro de colonización llamado Metal. Iniciar no es fácil, y menos cuando lo haces en un pueblo como Ocosingo,
donde, por el estilo que la banda maneja le fueron cerradas las puertas de
aceptación y abiertas las ventanas del rechazo, mala leche y distorsión
colectiva (o sea que hablaban mal de ellos pue), pero que poco a poco fueron rompiendo
al verlos progresar en cada una de las presentaciones y el talento de los
integrantes en escena que nadie discutió.
En “Voces Sin
temor!” se pueden apreciar sonidos contestatarios que surgen a partir de las
vivencias de cada integrante, de la cosmovisión que traen consigo y ese sentir
acumulado que todos en algún momento hemos presenciado. No cabe duda que la
mención de eventos como la situación que sufren en la actualidad familiares de
agrupación a partir de los conflictos en el magisterio les ha dejado un pésimo
sabor de boca, cosa que les ha ayudado a escupir las letras de canciones como
Esquizofrenia, ¡Ellos lo Verán! y Rebelión. Acontecimientos como la
desaparición de los 43 estudiantes, las vivencias que tuvieron cada uno a
partir del levantamiento del EZLN en 1994 y la llamada de advertencia en cuestiones
de las drogas estampan las expresiones del disco, que va desde el arte del
material físico hasta el sentimiento al momento de ejecutar sus instrumentos
musicales.
En la actualidad
mucho de los percances que se ha dado en distintos ámbitos es la pereza colectiva,
ya que la banda explica que tanto en organizadores como en asistentes han visto
un declive en la mayoría de los casos. Los primeros no se arriesgan a apostar a
las bandas con los medios necesarios (como transporte y en el algunos casos
¡SONIDO!) para poder tocar, ya que si bien los integrantes de la agrupación no
buscan llenar sus bolsillos con su sonido fijan la meta de exponer su material
de la mejor manera de modo que hagan explotar las cabezas asistentes, y los
segundos les pesa aportar $40, $50 o $70 en las presentaciones, y en el caso de
cuando son gratis, el cuerpo se vuelve plomo y el mínimo esfuerzo por moverse
genera un sinfín de consumo energético corporal… por favor, todos nos quejamos
de que nuestra tierra nada más consume y produce banda en un 80%, y llegan
agrupaciones como la aquí expuesta y ni el visto bueno le hacemos para mantener
encendida esta llama que todo trae a su suerte.
La oportunidad de
tocar en diferentes lugares de nuestro estado, así como los principales centro
artísticos de Tuxtla Gutiérrez y San Cristóbal de las Casas ha nutrido a la
banda para que agarre enjundia en la pasión de continuar en lo que creen, en su
arte. Ya que si bien se les ha acercado público que tomate en mano les cita lo
que cualquier persona con poca critica diría, el cabalgar no disminuye, ya que
sabemos que así es este tren de locos.
Uno de los sucesos
que se marcaron en la plática fue la oportunidad que tuvo Tóxica de alternar
con una de las bandas esenciales dentro del Metal mexicano, me refiero a
Leprosy pilar de esta corriente musical. De la voz de Fido se expulsó la
anécdota de que para buscar un lugar dentro de esta presentación tuvieron que
talonearle con mucha insistencia, porque todo el público se acercaba a la banda
para comentarles que estaría de maravilla que ellos participaran en la escena
telonera, ya que como banda estaban a nivel de tal ocasión. Taloneada tras
taloneada se hizo lo que anhelaban, los integrantes nos podían fallar a lo que
venía y días antes afilaban sus instrumentos para derrochar lo que tenían
consigo, cosa que tuvo comentarios positivos durante la plática.
La banda no se
desalienta con lo que han presenciado, es decir, el lento proceso de aceptación
que tienen ante el público chiapaneco no les hace ni la menor cosquilla para
salir adelante. Con felicitaciones y muchas reconocimientos por parte del
público conocedor, la banda Tóxica hizo hincapié que van a sorprendernos con
más presentaciones y material musical en el 2016, ya que en sus cuevas cuecen
canciones que huelen a Thrash de la vieja escuela, y amenazaron con no esconder
sus voces para utilizarlas ante una sociedad que carga con una pena de
injusticias.
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